Las Vocalías de Atención Primaria Rural y Urbana del CGCOM rechazan el actual sistema de adjudicación de plazas de formación sanitaria especializada (MIR)

  • La decisión unilateral adoptada, sin tener en cuenta la opinión de los profesionales y sus representantes, no garantiza una elección justa y con garantías.
  • Es urgente una rectificación que permita una elección en tiempo real, con transparencia, control continuo y conociendo de las plazas asignadas y de las que quedan
  • En el momento actual de la pandemia, con público en teatros, conciertos, restaurantes y eventos deportivos es posible realizar la elección mediante un modelo mixto, que implica la presencia por turnos de unas decenas de electores en un gran salón en el que se pueden guardar las distancias y resto de medidas de protección.

 

Ante la resolución de la Dirección General de Ordenación Profesional del Ministerio de Sanidad por la que se convocan los actos de adjudicación de plaza correspondientes a las pruebas selectivas 2020 para el acceso en el año 2021, a plazas de formación sanitaria especializada, las Vocalías Nacionales de Atención Primaria Rural y Urbana del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM) expone lo siguiente:

El nuevo equipo directivo que compone la Dirección General de Ordenación Profesional vuelve a caer en errores cometidos en etapas anteriores al implementar un sistema de elección de plazas muy alejado del sentir de la profesión médica y sus representantes.

Desde la OMC los representantes de médicos jóvenes y tutores siempre han estado abiertos al diálogo y a la comunicación directa, fruto de ello son las diferentes reuniones y exposiciones públicas conjuntas que se han llevado a cabo y cuyo objetivo era advertir y encaminar las decisiones de este ministerio para adecuarlas al sentir del colectivo de médicos jóvenes, entre los que se encuentran los aspirantes a las plazas de formación sanitaria especializada.

Siempre se ha advertido que, de implementar nuevos modelos de adjudicación de plazas, estos deben de presentar las suficientes garantías y deben de realizarse de una manera escalonada para evitar que, el cambio de paradigma al que vamos encaminados con la digitalización, cause un cisma que provoque situaciones que nos hagan retroceder y generen desconfianza en el sistema y su gobernanza.